No es por sonar como el Grinch, pero las fiestas tienen un "lado oscuro". Eso suena muy siniestro, así que vamos a dejarlo mucho más claro (y menos espeluznante).
Según el Synergy Wellness Center, los estadounidenses que participaron en un estudio demostraron que, de media, las personas aumentan entre un 0,2% y un 0,4% de su peso corporal durante las fiestas. Gran parte del trabajo del año dedicado a mantener un peso saludable y un estilo de vida activo puede perderse en cuestión de días. Por lo tanto, es conveniente poner en práctica algunos consejos para no descuidar el bienestar durante estas fechas.
Seguro, todos podemos usar pantalones elásticos para superar esas deliciosas sobras de las comidas navideñas, pero el verdadero problema no es el aumento de peso; el verdadero problema es el impacto negativo que tienen en nosotros estos comportamientos navideños no controlados
Todos estos excesos hacen que la Navidad traiga las siguientes consecuencias para la salud:
La buena noticia es que (como nos enseñó el Grinch), siempre hay esperanza. Es posible tener una celebración navideña saludable, la clave es evitar caer en los excesos. Pero, ¿qué más debes tener en cuenta? Estas son las 8 sencillas reglas:
1. No te conviertas en un teleadicto
Muchas personas tienden a dejar de hacer ejercicio en esta época del año y llevan una vida más sedentaria que, combinada con la ingesta de alimentos ricos en calorías, hace que sus niveles de grasa corporal aumenten aún más. Por eso es fundamental mantener las rutinas que se han llevado a cabo durante todo el año.
Claro que puedes bajar la intensidad de tus entrenamientos si tu agenda social está llena, o tal vez optar por paseos rápidos. ¡Pero nunca dejes de moverte!
2. Disfruta de la deliciosa comida, pero no te excedas
La palabra clave es siempre: moderación. Sí, la comida navideña suele ser increíblemente deliciosa, pero no te excedas.
Prueba algunas alternativas bajas en azúcar y a base de plantas; pueden ser una forma estupenda de obtener toda la exquisitez sin inclinar la balanza demasiado. Y, por supuesto, presta especial atención a los postres, ya que suelen ser los más densos en calorías pero deficientes en nutrientes.
Opta por medias cantidades de una pieza entera; así podrás degustar esos deliciosos platos, sin tener la culpa de comer demasiado.
3. Ten un plan adecuado
Esta es una época de reuniones, y para muchas personas, compaginar sus obligaciones diarias con todos sus compromisos sociales puede ser agotador. Por eso es crucial organizar cuidadosamente las numerosas actividades que tienes en mente.
Puedes visualizar todas tus responsabilidades de forma más organizada creando un calendario. Utilizar papeles de colores como una especie de semáforo para distribuir eficazmente el tiempo de cada actividad durante estas fechas es una gran idea.
4. Mantén el consumo de alcohol bajo control
El alcohol y las celebraciones suelen ir de la mano, y esto es especialmente cierto en una festividad como la Navidad, en la que no falta el vino, el champán o algún cóctel en particular. No hay absolutamente nada de malo en tomarse unas cuantas copas (a menos que seas menor de edad, en cuyo caso ni se te ocurra), pero unas cuantas copas pueden acumularse de verdad cuando te lo estás pasando en grande.
El primer consejo es mantener el estómago lleno para evitar que los brindis te empiecen a hacer sentir el mareo. Además, esfuérzate por equilibrar tu consumo de alcohol y de agua. Así será más fácil deshacerse de él y evitar una mala resaca.
5. Hablando de agua... ¡Mantente hidratado!
Puede parecerte que mantenerse hidratado está en todas las listas de bienestar, pues bien, ¿qué te dice eso de su importancia?
El agua es un aliado de la salud en cualquier época del año, como ya hemos apuntado muchas veces. Mantener una ingesta saludable, especialmente durante las fiestas, puede ayudar a mejorar el tránsito intestinal y prevenir problemas estomacales. Además, previene problemas provocados por la deshidratación.
6. Cuidado con la lista de ingredientes
Una dieta saludable no arruinará la fiesta. Se puede saciar el hambre con alimentos ricos en frutas y verduras, evitando el consumo de alimentos con excesivas calorías. Cocinar con poca sal y utilizar alimentos con mucha fibra también es una gran idea.
7. Deja espacio para un tiempo de descanso
Nuestros cuerpos y mentes necesitan tiempo para descansar para estar sanos, pero entre las cenas tardías, las fiestas y la familia que visita tu casa, puede ser difícil dormir lo suficiente. Es hora de empezar a salir de fiesta como si hubiera un mañana.
8. Disfruta de la familia, los amigos y comparte el amor
La Navidad es una época de amor y cariño. Por eso, pasar tiempo con tus seres queridos es lo mejor que puedes hacer. La mejor manera de liberar endorfinas es experimentar la alegría o el amor. Al hacerlo, se evitarán problemas como la depresión y aumentará la sensación de bienestar.
¡Salud! Por unas fiestas saludables
Durante mucho tiempo, las fiestas han estado marcadas por los excesos en la comida, la bebida y las celebraciones. Es importante tener en cuenta que, aunque disfrutar no es necesariamente malo, es muy posible hacerlo manteniendo los hábitos saludables.
Opciones sencillas pueden marcar la diferencia y hacer de esta época de fiestas, la más saludable de tu vida.
¡Felices fiestas!